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El ingreso promedio por pedido (AOV) es la cantidad promedio de dinero que un cliente gasta cada vez que realiza un pedido en tu tienda. Entonces, si tu AOV es 37 USD y tienes 80 pedidos en una semana, puedes esperar vender aproximadamente 2960 USD en producto en esos 80 pedidos.
Vale la pena rastrear el AOV de tu tienda regularmente, especialmente si has estado en el negocio durante un año o más. En las primeras etapas de un negocio de comercio electrónico, cuando todavía estás creando una base de clientes y averiguando qué vender, tu AOV probablemente será más bajo y variará más mes a mes.
¿Por qué es importante el ingreso promedio por pedido?
Por lo general, AOV refleja cuántos artículos agregan tus clientes a su carrito cada vez que compran en tu sitio web. Cuanto mayor sea el ingreso promedio por pedido, más comprarán tus clientes cuando lo visiten.
La cantidad de cosas que alguien compra en cada visita al sitio web también puede reflejar lo bien que estás comercializando todo tu conjunto de productos. La idea es que si mantienes a los visitantes en tu sitio web por más tiempo y lanzas de manera efectiva las otras cosas que vendes, naturalmente agregarán más cosas a su carrito. Un ingreso promedio por pedido más alto significa que estás vendiendo más productos e idealmente obteniendo un mayor beneficio como resultado.
Cómo calcular el AOV
Para calcular el valor promedio de tu pedido, divide los ingresos totales de un periodo establecido por el número de pedidos que recibiste durante ese periodo. El número de ingresos normalmente incluye el precio de tus productos más el envío, pero no los impuestos. Ese es tu AOV.
Entonces, si vendiste 5200 USD de producto en junio (sin restar tus costos operativos y de materiales) y recibiste 236 pedidos, tu AOV para junio sería 5200/236 = 22.03 USD.
El AOV se mide por el número de pedidos en lugar de por clientes individuales, así que, incluso si el mismo cliente hizo dos pedidos en junio, cada pedido se tendría en cuenta en el ingreso promedio por pedido por separado.
Factores que afectan tu AOV
El factor clave en el valor promedio de tu pedido es el precio de tus productos. Si ofreces productos de menor precio, es posible que tengas un AOV más bajo. Mientras tanto, si tienes artículos a la venta a una amplia gama de precios, tu AOV puede darte una idea de si estás vendiendo artículos de menor o mayor precio.
Por supuesto, si estás realizando una promoción de descuento, puedes esperar tener un AOV más bajo. Del mismo modo, si los clientes suelen comprar solo una cosa cuando visitan tu tienda, tendrás un AOV que está más cerca del precio de tu producto más popular.
Maneras de aumentar el AOV
El primer paso para aumentar el ingreso promedio por pedido es entender qué está contribuyendo a tu AOV actual. Mira el precio de tus productos, las promociones recientes que has realizado y cuántas cosas agregan la mayoría de los clientes a su carrito en cada pedido.
Dependiendo de lo que esté contribuyendo a tu AOV, aquí hay algunas formas de aumentar ese número.
Agrega productos de mayor precio a tu tienda o cambia tu estrategia de precios.
Descubre qué es lo que impulsa las ventas de tus productos más populares y aplícalo en otro lugar.
Ofrece otras recompensas por comprar, como regalos o recompensas por lealtad de clientes.
Agrega marketing a tus productos de mayor precio para generar más ventas.
Vende productos agrupados.
Establece una cantidad mínima de pedido para obtener envío gratis.
Haz ventas adicionales o ventas cruzadas de artículos adicionales mostrando los productos relacionados con los clientes en las páginas de productos.
Haz ventas adicionales o ventas cruzadas enviando correos electrónicos a los clientes para compartir recomendaciones de productos.
Lee nuestros consejos para aumentar las tasas de conversión en tu tienda
Cómo medir y rastrear tu AOV
Puedes usar las herramientas integradas en tu plataforma de comercio electrónico para medir y rastrear tu AOV a lo largo del tiempo. Las herramientas de análisis de ventas de Squarespace calculan automáticamente tu AOV para que puedas rastrear fácilmente los cambios en el número en el panel de tu sitio web.
Si tu plataforma no hace los cálculos por ti, deberías poder encontrar tus pedidos totales y tus ingresos totales durante un cierto periodo en tus análisis. Entonces, puedes hacer los cálculos usando la fórmula anterior.
Con qué frecuencia medir tu AOV
La frecuencia con la que rastreas tu AOV depende de ti y lo que tiene sentido para tu tienda. Mira con qué frecuencia cambia tu AOV diaria o semanalmente. Si hay grandes cambios en esos periodos, podría tener sentido registrarse con más frecuencia.
Considerar periodos más largos puede darte más contexto. Por ejemplo, puedes ver que tienes un ingreso promedio por pedido más alto durante la temporada navideña que en los meses de verano.
Del mismo modo, tiene sentido verificar tus métricas después de hacer cualquier cambio en tu marketing. Por ejemplo, es posible que quieras ver el impacto en tu AOV en los días y semanas posteriores a enviar un correo electrónico de ventas o después de publicar sobre un nuevo producto en las redes sociales.
Otros indicadores de comercio electrónico para rastrear
AOV es solo uno de los muchos indicadores clave de rendimiento (KPI) que pueden ayudarte a hacer crecer tu tienda online. Por supuesto, tendrás que rastrear el total de pedidos que obtienes y tus ingresos y ganancias en periodos establecidos.
Para obtener la información más útil de tus datos de ventas, considera también rastrear estos otros indicadores.
Tasa de conversión: esto refleja qué porcentaje de visitantes a tu sitio web se convierten en clientes que pagan.
Costo de adquisición de clientes (CAC): esto desglosa cuánto gastas en anuncios u otro marketing pagado por cliente que paga que obtienes de ese gasto.
Número de clientes nuevos y repetidos: los números de clientes nuevos y clientes repetidos reflejan la salud de tu negocio. Traer nuevos negocios y retener a los compradores existentes es cómo creces.
Número de unidades vendidas por artículo: el seguimiento de este número te ayudará a ver qué productos o tipos de productos son los más populares, para que puedas planificar el inventario, el abastecimiento y la comercialización.
Ingreso por visita (RPV): RPV mide cuánto dinero ganas en promedio cada vez que alguien visita tu tienda. A diferencia del AOV, el RPV incluye visitas en las que alguien no gasta dinero.
Ingresos, ganancias y ventas por producto: al igual que las unidades vendidas por artículo, esta información puede ayudarte a decidir dónde enfocar tu presupuesto, tiempo o marketing.
Ventas por fuente de tráfico: cuando sabes dónde te encuentran la mayoría de tus clientes compradores, puedes invertir más en ese canal o encontrar formas de mejorar la conversión de otras fuentes de tráfico.
Tasa de abandono del carrito de compras: esto refleja cuántos clientes abandonan tu sitio antes de terminar el proceso de pago. Las altas tasas de abandono pueden significar que tus costos de envío u otras tarifas son demasiado altos.
No tienes que rastrear cada una de estas cosas para estar al tanto de tu negocio de comercio electrónico. Decide cuáles son tus metas para tu negocio durante un periodo determinado, como tres, seis o 12 meses. Entonces elige algunos KPI en los que concentrarte y que te indiquen cómo estás rastreando esos puntos de referencia y ajústalos según sea necesario.