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Al vender en línea, puedes conectar a clientes de todo el mundo con tus productos o servicios. Más de dos mil millones de personas compraron en línea durante 2020, gastando $4.2 billones de dólares en todo el mundo, y mientras más consumidores compren virtualmente, más oportunidades habrá para lanzar y desarrollar un negocio de comercio electrónico que perdure.
Plataformas integrales como Squarespace facilitan a los creadores independientes, a los fabricantes apasionados y a los emprendedores con grandes sueños el comenzar negocios minoristas en línea. Ya sea que busques vender arte, ropa, alimentos o artesanías, estos son los consejos y las herramientas que necesitas para comenzar.
Decide qué vender
El primer paso para vender algo en línea es decidir qué quieres vender. Empieza por reducirlo a una categoría general, como arte, ropa, comida o artesanías, luego profundiza aún más.
Si decides vender arte, por ejemplo, ¿te especializarás en obras originales, impresiones o descargas digitales? ¿Eres un artista que creará sus propias obras o un curador que venderá el trabajo creado por otros? Ya sea que tengas un estudio lleno de obras de arte originales listas para vender, o que te interese coleccionar y vender arte creado por otros, tener una idea clara de lo que venderás antes de comenzar te ayudará a enfocar tus esfuerzos.
Con un plan sólido bien establecido para lo que vas a vender, puedes centrar su atención en cómo lo venderás. Al crear tu propio sitio de comercio electrónico, puedes maximizar tu alcance y aumentar las oportunidades de que los clientes te encuentren y compren contigo. Si ya vendes en una plataforma como Etsy, puedes empezar a establecer relaciones más directas con los clientes importando el inventario de tu mercado a tu sitio web.
Por último, piensa en la última parte del recorrido de tus artículos. Las consideraciones de envío pueden variar en gran medida según lo que vendas. ¿Tus productos son voluminosos, pesados o frágiles? Asegúrate de que tus estrategias de embalaje y envío garanticen que los pedidos pasarán de tu negocio a las casas de tus clientes en una sola pieza. Ya sea que necesites abastecer cajas muy resistentes, acumular un suministro de envoltura de burbujas u ofrecer recolección local a tus clientes, planea con anticipación para asegurarte de que puedas abastecer los pedidos de manera segura.
¿Estás listo para monetizar tu creatividad? Aprende todo lo que necesitas saber sobre cómo vender arte en línea.
Equilibra los intereses comerciales y los de los clientes
Una vez que sepas lo que vas a vender, asegúrate de tener un plan sobre cómo producirás o adquirirás esos bienes. Si tu tienda en línea se enfoca en ropa, por ejemplo, decide si crearás la ropa tú mismo, armarás una colección retro, comprarás artículos al por mayor o trabajarás con un socio de producción.
Comparte la mayor cantidad de información posible en tu sitio web para crear una mejor experiencia para el cliente y ayudar a que su negocio de ropa en línea gane una reputación de fiabilidad y confianza. Usa fotografías de productos y escribe descripciones detalladas de los productos para mostrar claramente tus artículos a los compradores en línea. Si vendes ropa de segunda mano, por ejemplo, querrás incluir fotos de las imperfecciones. De esa forma, tus clientes podrán tomar decisiones de compra informadas, lo que ayudará a garantizar que les encanten los artículos que compren.
Maneja las expectativas de tus clientes ofreciendo políticas claras de devolución, cambio y reembolso. Asegúrate de establecer un límite de tiempo, por ejemplo, 30 días o 60 días. Con políticas de tienda claras y bien establecidas, los clientes pueden comprar con confianza sabiendo exactamente cómo y cuándo pueden hacer cambios si no están 100 % satisfechos.
¿Te interesa lanzar un negocio minorista? Comienza con nuestra publicación sobre cómo vender ropa en línea.
Aprende las reglas de tu industria
Cada negocio en línea tiene que seguir regulaciones específicas para funcionar sin problemas. Investiga un poco las leyes locales y estatales para asegurarte de cumplir con todas ellas. Es posible que necesites un permiso comercial de tu estado o un permiso específico para tu industria. Si vendes alimentos, por ejemplo, es probable que necesites una licencia de manipulación de alimentos o una licencia de establecimiento alimentario.
Es una buena idea realizar una investigación de mercado que te brinde una mejor idea de lo que están haciendo tus competidores y cómo diferenciar tu negocio. Una vez que identifiques lo que te hace único, tómate el tiempo para contar esa historia en tu sitio web. Es posible que desees correr el telón sobre los materiales e ingredientes que utilizas, detallar tus procesos de elaboración o presentar a las personas que participan en la elaboración de tus productos. Cuando muestras a los consumidores que compartes sus valores, es más probable que se conviertan en clientes leales.
Equilibra el crecimiento de tu base de clientes con la conservación de la calidad de los productos que vendes. Por ejemplo, ciertos artículos se benefician de hecho de las opciones sin envío. Los productos alimenticios podrían requerir refrigeración o incluso congelación para mantener su calidad durante viajes largos. Si es apropiado para tu modelo de negocio, considera ofrecer alternativas y recolección en persona para garantizar la calidad de tus pedidos.
¿Estás listo para que tu negocio de alimentos llegue a más clientes? Lee nuestra guía para vender alimentos en línea.
Conéctate a la experiencia del comprador
Todo, desde los productos que vendes hasta el sitio web donde los vendes, debe reflejar tu gestión de marca única. Sean cuales sean tus productos, asegúrate de que la imagen de tu marca coincida con su estética general. Por ejemplo, si vendes decoración para el hogar hecha con encaje, puedes diseñar un logotipo que imite el estilo ligero y con bucles de tus artesanías. Crear una experiencia de marca coherente desde tu nombre, logotipo y diseño de sitio web directamente hasta las artesanías que vendes puede motivar a los clientes a formar una conexión emocional con tu empresa.
Hay algunas empresas en las que las diferencias e imperfecciones entre productos individuales son un problema. Sin embargo, para ciertos productos, en particular los hechos a mano, en realidad es una buena idea apoyarse en los detalles únicos de cada artículo. Sé lo más preciso posible sobre las dimensiones, materiales, peso y elaboración de cada artículo, e indica si son de esperar variaciones en el patrón, color o tamaño. De esa manera, puedes celebrar los puntos de diferencia como un beneficio y animar a los clientes a acoger las cualidades únicas de sus artículos.
Independientemente de lo que vendas, asegúrate de que tu sitio web comunique claramente tus políticas de envío, información sobre cómo se crean tus artículos y detalles sobre cuánto tiempo deben esperar los clientes antes de recibir sus pedidos. Publicar políticas claras es una buena manera de ayudar a los consumidores a planificar con anticipación y sentirse apoyados, evitando decepciones innecesarias en el camino.
¿Vas a vender artículos únicos? Echa un vistazo a nuestra publicación sobre cómo vender artesanías online.
Elimina los dolores de cabeza con el inventario
Para los vendedores que prefieren administrar un negocio sin inventario, es una excelente opción vender productos no físicos como suscripciones de contenido, membresías, clases en línea o descargas digitales. Puedes aprovechar herramientas como los sitios para miembros de Squarespace para crear contenido restringido, lo que significa que las secciones de tu sitio web estarán detrás de un muro de pago o "paywall".
Si vendes productos físicos, puedes asociarte con empresas de terceros que administrarán el envío y el inventario en tu nombre. Los servicios de impresión bajo demanda, por ejemplo, facilitan a los vendedores independientes ampliar sus negocios sin tener que asumir gastos innecesarios. En lugar de hacer pedidos al por mayor o comprar a granel, la impresión bajo demanda significa que cada vez que un cliente hace un pedido en tu tienda, tus artículos se crean específicamente para esa persona. La impresión bajo demanda es una excelente opción para músicos, artistas y otros empresarios creativos que venden productos de marca o usan una tienda online para apoyar su negocio principal. La función Productos personalizados de Squarespace es una forma sencilla y de bajo riesgo de empezar a vender productos impresos bajo demanda, gracias a la integración de la función con el proveedor líder de impresión bajo demanda Printful.
El envío directo es otra opción sin inventario que implica trabajar con un socio de logística que empaqueta y envía tus productos a los clientes por ti en respuesta a cada pedido. Algunos socios de envío directo almacenan y administran tu inventario en tu nombre, pero otros se combinan con servicios de impresión bajo demanda, lo que significa que cada vez que haces una venta, ellos crean el artículo y lo envían. El envío directo es una forma eficiente de administrar un negocio sin inventario, ya que elimina el paso intermedio de enviar artículos de una imprenta o distribuidor a ti, y luego de ti a tu cliente.
Los pedidos anticipados, la fabricación a medida y la venta a comisión también son buenas opciones para negocios sin inventario. Esos términos, y otros similares, son ligeramente diferentes, pero como categoría, implican que estás creando un artículo después de hacer una venta. Los pedidos anticipados te permiten anticipar cuántas unidades necesitarás crear incluso antes de lanzar un producto, mientras que los modelos personalizados y de comisión funcionan como un proceso uno a uno: un cliente realiza un pedido y tú produces su artículo en respuesta a esa orden.
¿Buscas formas de optimizar tu tienda online? Lee nuestra publicación sobre cómo vender en línea sin inventario.