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La inteligencia artificial (IA) ya no es una tecnología emergente. Esta tecnología, capaz de imitar respuestas y tareas similares a las humanas, ha existido durante décadas. La introducción de ChatGPT de Open AI la ha hecho prevalente y ha generado conversaciones continuas sobre si la IA realmente ha venido a apropiarse de nuestros trabajos.
Pero, sin contexto sobre lo que es la IA y cómo las empresas pueden usarla de manera efectiva, es fácil pasar por alto las formas en que también puede beneficiarnos.
En esta guía, trataremos los conceptos básicos de lo que es la IA y cómo funciona desde el punto de vista técnico. Si bien la IA puede ser parte de nuestro estado presente y futuro para el trabajo y la vida, hay diferentes tipos de tecnología que nos llevan hasta allí, y tenemos algunos consejos para aprovechar al máximo la integración de la IA en cualquier flujo de trabajo para que puedas concentrarte en las tareas que disfrutas.
¿Qué es la inteligencia artificial?
La inteligencia artificial (IA) es una ciencia informática avanzada que utiliza tecnologías y máquinas (como computadoras, robots y algoritmos) para simular interacciones similares a las humanas.
Algunos ejemplos reales de IA que se usan en la vida cotidiana ya incluyen:
Mapas y navegación: las instrucciones para llegar a un lugar en tu aplicación favorita se generan a través de datos procesados alimentados a IA que usa algoritmos para predecir y comprender las mejores rutas.
Chatbots: los equipos de atención al cliente han adoptado la IA para ayudar con las solicitudes sencillas de los clientes, como entender una política de devoluciones, rastrear un pedido o encontrar la información de contacto de una empresa.
Pagos: las empresas y los bancos usan la IA para procesar y depositar pagos. Las empresas incluso usan la tecnología de IA en segundo plano para buscar fallas de seguridad y para gestionar las identidades.
Detección de rostros: desbloquear tu teléfono con tu rostro no sería posible sin la IA.
Los diferentes tipos de IA
La IA puede ser un término general, pero no toda la IA se construye de la misma manera o puede hacer las mismas cosas. Hay cuatro tipos principales de IA, dos de los cuales aún no hemos visto en la vida cotidiana.
1. Máquina reactiva
La IA de máquina reactiva es precisamente lo que las palabras indican: este tipo de IA responde y reacciona a los datos en tiempo real, pero no tiene la capacidad de almacenar dichos datos ni de tener un banco de memoria. La IA de máquina reactiva se suele programar para analizar comportamientos y datos específicos en lugar de depender de comprenderlos y responderlos con información pasada, como otros tipos de IA.
Este tipo de IA es útil para tareas repetitivas o laboriosas como subir y transcribir audios.
2. Memoria limitada
La IA de memoria limitada tiene la capacidad de almacenar y recordar ciertos tipos de información o nuevas tareas. Pero, como su nombre indica, sus capacidades están restringidas. Por ejemplo, este tipo de IA se usa en vehículos autónomos. Puede procesar lo que está sucediendo en función de la información que inicialmente se les ha introducido para que conduzcan.
Un chatbot es otro ejemplo de IA de memoria limitada. Aunque a menudo se escribe un script, un chatbot reacciona y entiende las indicaciones proporcionadas por los clientes para encontrar respuestas de un grupo específico de datos programados en la herramienta.
3. Teoría de la mente
Los siguientes dos tipos de IA entran en el ámbito de la sensibilidad y la autoconciencia que muchos creen que es típico de la experiencia de la IA y no están del todo preparados para el consumidor.
La primera es la teoría de la mente, que es un tipo de IA que se basa en una memoria limitada, capaz de almacenar información y reaccionar con experiencias pasadas, con una comprensión de las emociones humanas. La IA no puede responder o generar experiencias emocionales auténticas.
4. Autoconsciente
El último tipo de IA es uno del que estamos más alejados: la autoconsciente. Con la IA autoconsciente, un robot o una computadora son más parecidos a los seres humanos: son capaces de procesar información, responder a ella y reaccionar con emoción y autoconciencia. Eso significa que entiende cuando está enojada y se ajusta en consecuencia, de manera similar a cómo manejamos nuestras propias emociones.
Cómo funciona la IA
Ahora que hemos repasado los diferentes tipos de IA, vamos a desentrañar los procesos, conjuntos de datos y diferentes campos de IA. La tecnología necesita, en términos más generales, consumir una amplia franja de datos de todas las vías para poder responder y reaccionar de manera efectiva a un mensaje.
Por ejemplo, si quieres saber cómo escribir un breve correo electrónico de presentación a cualquier cliente que se suscribe a tu newsletter, podrías preguntarle a una herramienta de IA cómo hacerlo y obtener un resumen completo con consejos como respuesta. Sin una generosa cantidad de información extraída de una variedad de fuentes, esa respuesta no sería posible.
Los principales campos y técnicas de IA incluyen:
Redes neuronales: esta técnica imita lo que hace el cerebro en los seres humanos, creando vías neuronales para que la información viaje, y es un componente del aprendizaje profundo. Esto nos permite clasificar y agrupar la información muy rápidamente. Los algoritmos de búsqueda son un ejemplo de una red neuronal.
Aprendizaje automático: si bien gran parte de la IA necesita alguna intervención humana, el objetivo es no que no haya ninguna intervención. Eso sucede con el aprendizaje automático (ML), lo que significa que la IA puede aprender, procesar datos y mejorar con el tiempo. Piensa en cualquier algoritmo que entregue contenidos que te gusten basado en comportamientos pasados. Eso sucede gracias al ML.
Aprendizaje profundo: como subconjunto del ML, el aprendizaje profundo ofrece más complejidad y puede hacer tareas más complicadas. ¿Necesitas generar arte para una publicación en redes sociales? Esto es posible debido al aprendizaje profundo.
Grandes modelos de lenguaje: una manera importante en que se genera texto es a través de grandes modelos de lenguaje (LLM). Se proporciona información a un programa de computadora para que pueda reconocer e interpretar el lenguaje y otros tipos de datos. La tecnología utiliza esos datos para predecir patrones de lenguaje y generar texto, como cuando le pides a una IA que redacte un correo electrónico.
Procesamiento del lenguaje natural: de manera similar a los LLM, el procesamiento del lenguaje natural (NLP) reconoce y entiende el lenguaje humano y responde de manera amable, de manera similar a un ser humano, en lugar de ser frío y robótico. Piensa en cualquier asistente digital que responda a tu solicitud con un tono y lenguaje similares.
Qué se debe tener en cuenta cuando se usa la IA
La IA es un socio excelente para los propietarios de negocios, desde pequeños hasta empresas. Sin embargo, es importante entenderla precisamente así: como un socio. Si bien la IA causa furor y es llamativa en las noticias, como cualquier otra herramienta, tiene sus limitaciones y consideraciones.
Para entender completamente la IA e incorporarla en el flujo de trabajo de tu negocio, considera las siguientes inquietudes éticas y logísticas de antemano.
Precisión: lo que la IA produzca a partir de una consigna será tan útil como la directiva que se le haya dado y los datos que se hayan introducido y con los cuales se haya entrenado. La información que se le da a la IA no siempre es clara. Esto puede significar datos sesgados o objetivamente inexactos. Es importante verificar siempre si hay discrepancias o tergiversaciones en lo que una herramienta de IA genere para ti.
Privacidad: la IA se basa en un flujo constante de datos para procesar, analizar y brindar información a sus usuarios. Esto significa que, si obtiene acceso a tus datos privados, dependiendo del tipo de IA, es posible que no “entienda” completamente que no se deben usar ni acceder a ellos.
Copyright: la autoría es una gran preocupación con la IA. Es una herramienta fantástica para ayudar a generar texto o imágenes, pero es importante entender que, debido a que se está extrayendo de tantas fuentes diferentes, podría haber un riesgo de infracción de copyright si el contenido no se edita o ajusta.
Costo: dependiendo del tamaño de tu negocio, obtener y usar la IA puede ser costoso. ¿Construyes tu propia tecnología o contratas a un proveedor externo? ¿La IA será parte integral de tus operaciones diarias o una herramienta útil para ayudarte con la propuesta de ideas? El costo puede ser de poco a mucho dependiendo de para qué necesites la IA.
Singularidad: un elemento humano único es esencial para cualquier negocio exitoso, marca o conexión con la audiencia. Por diseño, las respuestas que generan las herramientas de IA son como un promedio de la información con la que han sido alimentadas. Por eso, es importante usar herramientas de IA de una manera que incorpore tus ideas y producciones, pero que no los reemplace.
Cómo incorporar IA en tu flujo de trabajo
Comenzar con la IA suele ser muy fácil. Pon en cualquier motor de búsqueda lo que necesites de una herramienta de IA y te sugerirá alguna. Squarespace AI es útil para pequeñas empresas y emprendedores que buscan ayuda para construir su sitio web, generar textos para el sitio web, enviar correos electrónicos a su clientela e incluso escribir descripciones de productos.
Pero incorporarla en el flujo de trabajo de cualquier negocio necesita un poco de consideración. Estos son nuestros consejos para incorporar la IA a tu trabajo de una manera que se adapte a tu negocio.
1. Entiende los objetivos de tu negocio
Comienza aquí y revisa continuamente estos objetivos a lo largo del tiempo para comprobar si siguen siendo lo que necesitas para tu negocio. ¿Buscas construir un sitio web? ¿Necesitas ayuda para generar textos para atraer a nuevos clientes? Crea una serie de objetivos en los que quieres trabajar y considera cómo la IA puede hacerlos más alcanzables.
2. Sé realista en cuanto a las tareas y las expectativas
Como hemos visto, la IA tiene sus limitaciones. Es importante que, al incorporar la IA al flujo de trabajo de tu negocio, la uses dentro de sus parámetros. Si usas Squarespace AI para ayudar a construir tu sitio web, la IA te proporcionará información sobre las opciones de diseño y textos para ayudarte a optimizarlo más rápidamente. Mantén las tareas dentro del marco de lo que la IA puede hacer.
3. Supervisa el rendimiento
Tus objetivos determinarán cómo supervisas el rendimiento de la IA pero, en general, es fundamental vigilar cómo se desempeña la IA para entender si tu negocio o flujo de trabajo se está beneficiando. Por ejemplo, después de implementar un flujo de trabajo de IA para el email marketing, ¿aumentaron las conversiones? ¿El esquema de estrategia y marketing de contenido proporcionado por una herramienta de IA realmente te ha ayudado a generar más tráfico o conciencia de marca?