De un fundador: Cómo Amira Rasool conecta a diseñadores africanos con una audiencia mundial

Nota del Editor: Bienvenido a From a Founder, un perfil mensual de emprendedores sobre las altas, las bajas y las mesetas de crear una marca o un negocio exitosos.

Después de conseguir el trabajo de sus sueños en una revista de moda recién graduada de la universidad, Amira Rasool estaba en carrera a construir la carrera en editoriales de moda que siempre había planificado. No obstante, su camino se desvió después de un viaje a Ciudad del Cabo, donde se conectó con diseñadores africanos a los que no había estado expuesta en EE. UU. A partir de allí, Amira empezó a dar los primeros pasos para lanzar The Folklore, una plataforma de comercio minorista en línea que conecta a los clientes con diseñadores de alta gama y emergentes de África y la diáspora.

Desde aprovechar las conexiones de la industria y efectuar una investigación exhaustiva, a aprender a esperar lo inevitablemente inesperado, Amira habló sobre cómo creó The Folklore desde el día uno, y cómo prevé continuar con el crecimiento de su negocio en los próximos años.

Squarespace: ¿Qué te inspiró para lanzar The Folklore? 

Amira Rasool: Me inspiré para crear The Folklore después de un viaje a Sudáfrica en 2016, durante el último año de mis estudios universitarios. Fue mi primer viaje a África, y mientras estaba allí, descubrí a muchos fabulosos diseñadores que desconocía y que sabía que tampoco eran conocidos para mis amigos en casa. Compré algunos productos y empecé a usarlos cuando volví a Nueva York, donde vivía en ese momento. Muchas personas me preguntaron dónde podían comprarlos. 

Después de recibir tantas consultas y halagos, empecé a investigar y concluí que muchos diseñadores africanos no tenían sitios web de comercio electrónico, y que no tenían distribuidores minoristas en EE. UU. que posibilitaran que clientes internacionales hicieran pedidos y disfrutaran de estos productos sorprendentes. Vi que había una gran brecha en el mercado; había un continente enorme lleno de diseñadores jóvenes realmente prometedores que podrían usar una plataforma, pero no solo una plataforma, sino un lugar en el que pudieran obtener los beneficios económicos de su creatividad.

SQSP: ¿Cuál fue el primer paso que diste para volverlo una realidad?

AR: Investigué mucho. Quería saber si había alguna compañía que ya estuviera ayudando a estos diseñadores e intentando resolver los principales inconvenientes para la distribución. Había algunas cuando empecé mi investigación, pero noté que todas tenían dificultades. Empecé a anotar lo que no me gustaba sobre estas compañías, temas que no estaban atacando. 

Renuncié al empleo en la revista que tenía en ese momento y me mudé a Ciudad del Cabo, Sudáfrica, entrevisté a estos diseñadores en persona y descubrí que necesitaban un distribuidor para comercio electrónico. Viajé a Ghana, Nigeria y Kenia y vivía en Ciudad del Cabo, con viajes constantes a Johannesburgo. Solo quería tomar todos los recaudos necesarios antes de decidir si realmente valía la pena emprender este negocio, y si podría tener un impacto significativo.

SQSP: En todos los emprendimientos hay riesgos y dificultades no previstos. ¿Cuál fue el mayor riesgo que asumiste? 

AR: El mayor riesgo que asumí fue dejar mi empleo y mudarme a Sudáfrica. Me había graduado hacía apenas unos meses, y había conseguido el trabajo de mis sueños en una revista de moda. Había hecho varias pasantías en revistas de moda durante mis estudios, y estaba bastante encaminada para convertirme en editora en jefe en una revista de moda o cultura importante. Así que decidí abandonar todos los años que había invertido en el sueño por algo en lo que recién había pensado un año o un año y medio antes. 

Mudarse a otro país a los 22 años de edad también fue un gran salto. Esta era mi segunda vez en Sudáfrica. No tenía amigos ni familiares allí. Solo fui, tomé un alquiler temporal y después de alrededor de un mes encontré un apartamento, compré muebles y empecé una Maestría, que terminé mientras creaba The Folklore. Fue sumamente arriesgado ver si podía lograrlo en este nuevo país, sola, y convencer a estos diseñadores para que se arriesgaran con esta joven y extraña estadounidense.

SQSP: ¿Qué fue lo que más te sorprendió? 

AR: Como una persona que es una gran planificadora, pensé que había hecho toda la investigación necesaria, que tenía todas las respuestas y que podría haber pocos imprevistos que me sorprendieran o me dejaran fuera de mi juego. No obstante, desde que inicié el negocio, parece que, cada día, suceden tres o cuatro cosas que no sabía o en las que no pensé para sorprenderme. Tuve que aprender a atacar lo desconocido, con o sin un plan, y en cualquier momento.

SQSP: Después de un día, una semana o un mes difíciles, ¿qué te mantiene motivada? 

AR: Soy especialmente buena para dormir y descansar. Estoy constantemente cansada así que me gusta simplemente poder sentarme en casa y mirar televisión o jugar al solitario. Podría hacerlo durante dos días seguidos hasta que me sienta suficientemente descansada para encarar la semana y atravesar esas jornadas de 10 a 14 horas de trabajo. La música también es una gran motivación para mí. Me encanta ir a shows en vivo, incluso a los pequeños espectáculos íntimos. Solo ver al artista y la dedicación a su arte, y lo apasionados que son por lo que están haciendo me inspira.

SQSP: ¿Cómo contribuyó tu presencia en línea al éxito de tu negocio? 

AR: Mi presencia en línea ha sido enorme. Cuando las personas ingresan en mi página personal, encuentran todos mis escritos. Como alguien que viene de los medios, sin dudas tuve muchas oportunidades que otros fundadores generalmente no tienen, porque tenía esas conexiones y las personas podían buscar en línea para ver quién es Amira de The Folklore gracias a que hice este sitio web de Squarespace superrápido. Actualicé sistemáticamente el sitio web con artículos nuevos que se publicaron y que realmente me hicieron sentir orgullosa. Estar en línea es superimportante; mi negocio está en línea y todos los artículos que escribí están en línea. Sin Internet, no existiría The Folklore y probablemente no habría recibido muchas de las oportunidades que tuve como escritora.

SQSP: ¿Cómo crees que evolucionará tu presencia en línea en el futuro? 

AR: Me veo a mí misma conectada con las personas en el futuro en línea. Creo que tiendo a retirarme de publicar con más frecuencia, en gran medida porque estoy constantemente ocupada, así que hacer tiempo para publicar siempre parece inconveniente. No obstante, estoy empezando a entender que debo priorizarlo, al igual que priorizo otros aspectos relacionados con mi negocio. Realmente quería conectarme más con el cliente de The Folklore, conectarme más con las personas que leen mis escritos, y también con las personas que he inspirado o que me han inspirado. Estoy planeando abrir esas líneas de comunicación para que me ayuden a crecer, con la esperanza de que también ayuden a crecer a otras personas.

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