Como muchos grandes artistas, Joebert Tupas afirma que tenía conflictos con la idea de "normalidad" cuando era niño. Nacido y criado en Filipinas, fue educado en un entorno conservador en el que las personas solían decirle lo que estaba bien, lo que estaba mal, lo que era normal y lo que no lo era. "Tenía miedo de expresarme. Permití que la gente me maltratara porque pensaba que me pasaba algo malo", dijo Tupas cuando nos encontramos en una charla virtual recientemente. "Me sentía verdaderamente confundido y temía expresar mi sexualidad", dijo.
Todo esto cambió, explica Tupas, cuando se mudó a Nueva York y descubrió la fotografía. El medio le permitió expresarse y aceptar su identidad de manera que antes no había podido hacer. "Tuve muchas dificultades para comunicarme y usé la fotografía para contar mi historia e interactuar con las personas. Me ayudó para expresarme, para salir de mi cascarón", explicó.
Cuanto más empezó a mostrarle al mundo quién es en realidad, más empezaron a brillar los talentos de Tupas. Su obra es brillante, audaz y divertida. Es provocadora, pero de una manera que te hace sonreír. Se trata de fotografía de moda que no solo muestra la ropa, sino que también deconstruye las normas sociales y de género, y explora las narrativas queer y "abraza todo lo raro", como él explica.
Recientemente Tupas concluyó una Maestría en Fotografía de Moda y ya ha sido destacado en varias publicaciones. A través de su éxito, espera que su obra inspire a las personas de todo el mundo para que no teman, sean audaces y no tengan remordimientos por ser quienes son.